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El secreto de la amistad

Buenas noches,

Decía el novelista Alberto Moravia que «la amistad es más difícil y más rara que el amor. Por eso, hay que salvarla como sea», y yo añadiría que las grandes amistades de la vida surgen de forma totalmente inesperada.

Conocí a mi amigo más antiguo a los 14 años en primer curso de lo que entonces era Bachillerato. Fanático del rock, había sido castigado a limpiar una mesa de clase donde había dibujado a rotulador una gran guitarra eléctrica de The Who con el lema “Long Life Rock’n’Roll”. Yo le ayudé a frotar con el paño y el detergente y allí nació una amistad que, 37 años después, sigue cruzando fronteras ya que, además de acompañarle en la publicación de dos libros, hemos viajado juntos a docenas de países. Y seguiremos haciéndolo hasta que la muerte nos lo impida.

El otro amigo que ha inspirado este post, Gabriel García de Oro, con motivo de un extraordinario libro de cuentos, llegó a mi vida el 2005. Aparentemente, lo único que teníamos en común era que ambos escribíamos. Se daban todas las condiciones para que no congeniáramos. Él es socio del Espanyol desde la cuna, yo simpatizo con el Barça. Aunque nunca hablamos de política —un caballero nunca incomoda a otro—, sin duda pensamos diferente. Él fue cantante de una banda de punk-rock, a mí siempre me han dicho que compongo canciones para chicas resfriadas.

Pese a todo, una noche que se leían cuentos en un bar nos hicimos amigos. Muy amigos. Desde entonces, he tenido el honor de leer siempre cada uno de sus libros —y ha escrito un buen número— antes de su editor. Y él es la llave prodigiosa que desatasca cualquier historia mía cuando me meto en un callejón sin salida.

Con las personas importantes que nos acompañan vivimos miles de historias, pero siempre hay una que guardamos en lo más profundo de nuestro corazón. Porque ese gesto encierra la esencia de esa alma en particular.

En mi caso, jamás olvidaré lo que sucedió cuando yo velaba a mi madre cada noche en la UCI de una clínica privada de Barcelona. Mi padre había muerto un par de años antes en aquella misma unidad, y me quedé con la impresión de que le habían facilitado la muerte porque estaba saliendo demasiado caro para la mutua que llevaba pagando toda su vida.

Con mi madre no quería que sucediera lo mismo, así que me emperré en pasar cada tarde y cada noche a su lado para asegurarme de que no sucedía nada raro. En medio de aquella locura, una noche Gabriel me llamó y me preguntó si quería que acudiera al hospital. «Vengo ahora mismo y me pegas, si quieres. Puedes descargar tu rabia contra mí.»

Y lo mejor de todo es que lo decía de verdad. Por supuesto, no le dejé venir y seguí pasando las noches allí solo hasta que mi madre se fue.

Muchos años después de ese episodio, he tenido el privilegio de prologar la obra magna de Gabriel García de Oro, al menos en el ámbito del relato infantil. Se llama La vuelta al mundo en 365 cuentos y creo que jamás he visto tal derroche de creatividad en un solo libro.

Ilustrado genialmente por mi amiga Purificación García, está dirigido principalmente a los niños, pero muchos de los cuentos sin duda «despiertan» a los adultos.  Hay muchos que me encantan, pero me quedo con los protagonizados por el genio Malgenio, como este en el que acontece una lluvia de dinero.

Un día, un hombre y una mujer encontraron una lámpara maravillosa enterrada en el jardín de su casa y salió el genio Malgenio.

—¡Qué queréis! —dijo Malgenio con cara de pocos amigos.

—Queremos dinero. Mucho dinero —dijo el hombre.

—Me parece bien —dijo Malgenio—. Una lluvia de dinero que moje a toda la ciudad.
—No queremos que llueva en toda la ciudad, queremos que llueva solo en nuestra casa. ¡Queremos el dinero solo para nosotros! —dijo la mujer.

Malgenio chascó los dedos y empezó una tormenta de monedas que caían del cielo con tanta fuerza que rompían las ventanas y todo lo que se ponía a su paso. Malgenio dijo:

—Cuando acabe la tormenta coged todo ese dinero y gastadlo todo en arreglar la casa. ¡Avariciosos!

A diferencia del matrimonio del cuento, su autor es una de las personas más generosas que conozco. Tal vez sea ese el secreto de la amistad: compartir las monedas que caen del cielo, gastarlas juntos. Ningún tacaño de dinero o de sentimientos ha tenido jamás un gran amigo, porque darse sin condiciones es la gran premisa de la amistad.

¡Feliz semana!

Francesc

Comments

  • PABLO

    19 noviembre, 2019 - 6:57 am

    «La amistad surge de la forma más inesperada…» no hace falta decir más Jajajaja

    Cuando pienso en cuantos amigos de verdad tengo la cuenta es pequeña, pero a ti te guardo en un lugar más que especial 🙂

    Sembramos lo que recogemos, y eso también está escondido en la moraleja del cuento con la avaricia. Entonces, a personas extraordinarias les acontecerán situaciones extraordinarias a la vez que inesperadas que traerán a su vida personas extraordinarias… Y con seguridad, Francesc Miralles es de los seres humanos más increíbles y generosos que la vida me puso en el camino.

    Gracias y mil gracias por aquella respuesta inesperada a un mail por haber leído una novela juvenil con más de 26 años que me hizo ir a conocer a una persona que ya nunca se marchó de mi historia, con mago incluido en el menú, de aquel stars café en Guadalajara jajaja y que hizo surgir una amistad sincera y altruista que nos ha traído hasta aquí y a la que aún le quedan muchas páginas por escribir.

    Si el mundo tuviera más personas como tú, con seguridad, sería un lugar muy distinto… Y se que las tiene, pero a mi en esta vida se me ha otorgado el privilegio y la oportunidad de conocer y compartir algunas experiencias de libro con una de ellas que se convirtió en uno de mis mejores amigos.

    Pasa una gran SEMANA Francesc.

    Un gran abrazo!!!

    • Francesc Miralles

      19 noviembre, 2019 - 4:38 pm

      Gracias por tu mensaje, querido amigo!!! Yo también recuerdo mucho nuestros inicios. El viaje a Guadalajara, la gira de Somne 2.0, el Mago y mil aventuras más… ¡Gracias por estar en mi vida!

  • Lérida

    21 noviembre, 2019 - 2:31 pm

    «Darse sin condiciones es la gran premisa de la amistad» …
    Lo comparto plenamente, Francesc. Muy emotivo y rico tu post. Y tú si que sabes de eso!!!
    Te cuento que ya me comunique con Mario. Quedamos de llamarnos en estos día para combinar y vernos un ratito. Tengo muchas ganas de que llegue!
    Yo estoy hasta el sábado en Montevideo, así que pienso se puede dar.
    ¡Gracias Francesc por regalarnos esa amistad tan rica, que es la que tu sabes tan bien dar y comunicar!!!
    ¡Un abrazo muy fuerte desde aqui!

    • Francesc Miralles

      21 noviembre, 2019 - 2:34 pm

      Mario lleva dos libros para ti, uno de ellos dedicado :))) ¡Te va a gustar mucho la simpatía de Marito! Otro abrazo fuerte desde este lado del mundo!!

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